Paso de contratar mantenimiento Web. Me lo ha enseñado todo mi colega

Mantenimiento web

Tabla de contenido

Sí, sí, tu colega… Ese que ha hecho un curso de mantenimiento web de 20 horas en la casa de la cultura de su ciudad. Seguro que puedes confiar en él el mantenimiento de la web. Tu amigo,  además de ser muy barato, no te hace factura y te ahorras un pico. ¡Y es que hay que ir con los tiempos! ¡La pandemia me ha hecho un lince y ahí dónde puedo ahorro! ¡Qué no te enteras!

 ¿Te has identificado con este tipo de figura? ¿Alguna vez se te ha pasado por la cabeza llevar tú mismo el mantenimiento web de tu empresa? ¿Aunque sea una página de envergadura? ¿Puede ir algo mal?

Parece mentira que haya que dar una respuesta afirmativa a esta pregunta, pero dejar pasar por alto el mantenimiento web es igual de peligroso que meter a Paquirrín en una despedida de solteras en Ibiza.

El mantenimiento web de tu página no es una broma

Sea cual sea tu estrategia, si posicionar tu página en Google, demostrar que tu diseño web es fantástico, o que por fin le has pillado el truco a Prestashop y has montado una tienda online brutal.  No invertir en mantenimiento web es suicida, como ir en moto sin casco. Porque en cuanto menos lo esperas, todo puede comenzar a fallar y no saber en qué tipo de fregado te has metido. Y créeme, no es necesario llegar a ese extremo.

¿Qué es el mantenimiento web?

 Muy sencillo, conseguir que tu página se encuentre actualizada en cuanto a los aspectos técnicos, que no son pocos. ¿Deseas saber todo lo que cubre un adecuado mantenimiento? Pues agárrate que empezamos.

  • La seguridad, ese aspecto tan importante y básico, se mantiene actualizada. Si piensas que esto no es importante, compra un dominio gratuito, algo de espacio en cualquier servidor, haz una paginita y pasa del tema. En 2 meses aquello puede ser una jungla. No te creas que la página que llevas va a ser menos. Piensa además un poco, si han conseguido reventar la base de datos de Phone House o dejar fuera de combate la del SEPE, ¿acaso te crees que tú vas a ser menos, mindundi?
  • Si tu página funciona con plugins, quien se encargue del mantenimiento va a mantenerlos al día. Es bastante habitual que un plugin deje de funcionar, trates de actualizarlo tú mismo y todo comience a ir peor. Si tienes contratado el mantenimiento, ellos se encargarán de todo y tendrás a alguien a quien pedirle explicaciones en caso de fallos.
  • El servidor se va a mantener al día. Quieras o no, necesita también de vigilancia. Cuando llegan los fallos nos entra dolor de barriga, y probablemente sea algo que no tengas la posibilidad de abordar. Más que nada por falta de conocimientos. Piensa además que cada hora que pasa con tu web fuera de servicio, es dinero perdido. ¿Cuántas veces te he dicho que actualmente el cliente no espera y busca lo tuyo en otro sitio? Sí, son unos cagaprisas, pero es lo que hay.
  • Se encargan de posicionar tu página para que le guste a Google. El SEO es más que colocar keywords, intervienen aspectos más complejos que no se aprenden viendo un tutorial de YouTube. Vamos, que están las empresas gastándose una pasta en posicionamiento para que tú, que eres más listo que nosotros, lo consiga gratis y en menos tiempo. No permitas que Google te hunda en la miseria ni te fagocite.
  • El diseño web. Aquí hay que hacer un hincapié especial. Con el diseño pasa como con el SEO, hay muchos “especialistas”. Las tendencias en diseño han variado mucho en muy poco tiempo. Ya no se llevan esas páginas donde había que meter de todo. Sí, en los 90 se ponían hasta sintonías MIDI. Molaba, pero ahora es un sacrilegio. Las tendencias actuales son las de ir hacia el minimalismo, a que el usuario vaya descubriendo poco a poco lo que ofreces. No que tu web sea como la carta de un restaurante chino. El mantenimiento suele llevar asociado el diseño web, y un equipo adecuado sabe qué es lo que ahora está funcionando. De esta manera, podrá ir aplicando actualizaciones que vayan haciendo la experiencia mucho más amigable. Muchas veces son los usuarios quienes van dando estas indicaciones en sus cometarios. Lo típico, “me ha costado encontrar este menú”, “la página me gusta PERO…” Además, pondrán a tu disposición una serie de plantillas Premium que hará que tu web sea guapa guapa y no una cutrez que no quieras tocar ni con un palo.
  • Hacen los backups y copias de seguridad adecuados. En caso de desastre, no te vas a librar, las rescatan del fondo del averno, las aplican y no ha pasado nada. Merece la pena pagar el mantenimiento web solo por esto, ¿no crees?
  • La empresa que hace el mantenimiento web hará auditorías para comprobar qué falla, si es que hay algo que falle, cómo es la respuesta de la página ante algunas incidencias y, sobre todo, cómo se puede mejorar. Siempre hay un margen importante para ello, y de eso se trata.

 ¿Qué ventajas nos da contratar el mantenimiento web?

 Solo hay ventajas, la inversión realizada nunca es algo a fondo perdido y desde el minuto 0 supone ya apostar por ser serios. Pero pasemos a ver cuáles son las ventajas principales de contratar un servicio de mantenimiento web.

  • Ahorro de tiempo y dinero: No sabemos lo importante que es un servicio de este tipo hasta que tenemos el problema. Cuando hay alguna cagada importante, el oráculo y los planetas se alinean para que ocurra al principio del fin de semana. Sí, ese en el que te has ido con la familia a la casita de la playa. Llegas el domingo por la tarde y ya no duermes y te arrepientes. Y cuando encuentras la solución, es por vía de urgencia. Y eso se paga. Con el servicio de mantenimiento vas sobre seguro y la respuesta es inmediata.
  • No tienes por qué contratar en un principio un servicio tope de gama. No hay 2 clientes iguales, pero un servicio de mantenimiento básico no supone un descalabro económico ni mucho menos. Si de momento tus pretensiones no son elevadas, comienza con algo sencillo, y poco a poco puedes ir aumentando a planes más completos.
  • Sí, externalizar este tipo de servicio es ganar en tranquilidad. Reconoce que es algo que se te queda grande, y aunque tengas unas nociones, los errores nunca son pequeños y empiezas a tocar de aquí y de allá hasta que lías la de San Quintín. No merece la pena ahorrar en este servicio.

Por tanto, el mantenimiento y todos sus aspectos asociados, como seguridad, velocidad, diseño web o capacidad de estar actualizado, es un factor clave para que todo funcione. Y sí, en este caso la palabra todo adquiere una presencia global. En el momento que hay un fallo, este desencadena una reacción en cadena y se extiende. El aleteo de una mariposa en un plugin termina provocando un terremoto en el servidor. No te la juegues.

Respuesta a las 4 decisiones que debes tomar para no arruinar tu web

Suscríbete para recibir las respuestas por email